¿Dónde está la contradicción?
La Física Clásica es la que todos conocemos de los estudios en la escuela media. Se calcula, se mide, se predice donde se va encontrar un móvil en determinado momento, con qué objeto puede chocar, cuanta energía pierde o gana al moverse según las fuerzas que actúan sobre él,qué impulso adquiere cuando le aplico una fuerza en un plazo de tiempo, etc,etc. Todo preciso y calculado.
Incluso al enviar una sonda a la luna o a marte los cálculos se basan e la física clásica y los errores son mínimos. Hay seguridad y precisión.
Cuando penetramos lo pequeño,el universo atómico, toda esa seguridad se pierde ,no podemos hacer mediciones sin alterar las condiciones de lo estudiado.
Se torna todo inseguro,impreciso, aparece la incertidumbre (El principio de incertidumbre de Heisenberg ) , nada se puede predecir.
Con los avances tecnológicos a comienzos del siglo XX aparece la física cuántica que trabaja con ecuaciones matemáticas llamadas las ecuaciones de onda de Schrödinger , donde se calculan zonas de probabilidad de encontrar a los electrones según los niveles de energía que ocupan y los orbitales que recorren en esos niveles.
Innumerables cálculos matemáticos que necesitan de varias dimensiones (3,5,7,9...) para explicar dichas probabilidades.
Los electrones, son pura energía de masa despreciable pero si bien en algunos casos se comportan como ondas, en otros experimentos actúan como partículas.
Una dualidad difícil de entender ya que como partículas actúan clasicamente mientras que cuando son ondas su estudio es cuántico.
La mecánica cuántica es fundamentalmente matemática que funciona experimentalmente.
EL UNIVERSO ATÓMICO ES PURA MATEMÁTICA Y EL HOMBRE AUN NO ADQUIRIÓ LA CAPACIDAD DE PENETRAR EN EL SIN ALTERARLO.
Autora: María Cristina Chaler
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